En email marketing, bounces (o rebotes en español) se refieren a los correos electrónicos que no llegan a la bandeja de entrada del destinatario. Esto ocurre cuando el servidor de correo del receptor (ISP) rechaza el mensaje por algún motivo.
Existen dos tipos principales de rebotes:
- Soft bounces: son rebotes temporales. Podría ser que un usuario no tenga espacio suficiente en la bandeja con lo que el email rebota. Otro ejemplo sería cuándo un usuario tiene puesto la respuesta automática «Out of office«.
- Hard bounces: son rebotes permanentes, como direcciones de correo inexistentes o mal escritas.

¿Qué utilidad tienen los Bounces?
☝ Los bounces son fundamentales para medir la salud de tu lista de correos y la efectividad de tus campañas, ya sean envíos 1-on-1 o para envíos masivos.
Identificar y gestionar los rebotes ayuda a mejorar tu deliverability rate (tasa de entrega), mantener una buena reputación de tu IP y sender address, y garantizar que tus correos lleguen a los usuarios. En otras palabras, los bounces te ayudan a entender sobre tu lista de usuarios y evitar que tus comunicaciones lleguen a la temida carpeta de SPAM.
Ejemplos de rebotes
Vamos a poner 15 ejemplos de Soft Bounces:
- El buzón está lleno: El destinatario necesita hacer limpieza en su bandeja de entrada, porque ya no cabe ni un correo más. 🚮
- El buzón no está configurado correctamente: Algo anda mal con la configuración del buzón, y tu correo se perdió en el limbo.
- El buzón está inactivo: Es como enviarle un mensaje a alguien que ya no usa su correo. 📪
- El servidor de correo del destinatario está caído o offline.
- El servidor de correo del destinatario recibió demasiados correos en poco tiempo: Llegaste justo en una avalancha de mensajes, y te tocó esperar. 📤 Clásico en el Black Friday.
- El mensaje es demasiado grande: Tu correo venía tan cargado que el servidor dijo: “¡Esto no cabe aquí!” Podría ser por contener imágenes demasiado grandes, archivos de PDF o simplemente emails muy largos que suman demasiadas KBs.
- El nombre del dominio no existe (por ahora): Puede que sea un problema temporal.
- Correo bloqueado por su contenido: Algo en tu mensaje no le gustó al servidor. Quizás has sido “spammy”.
- El correo no cumple las políticas del servidor del destinatario: Reglas son reglas, y tu mensaje no pasó el filtro.
- El correo falló el DMARC: Tu mensaje no pasó la prueba de seguridad del dominio. 🚫
- El correo no cumple los requisitos anti-spam del servidor del destinatario: El servidor cree que podrías ser un vendedor muy insistente.
- El correo no cumple con los requisitos antivirus del servidor del destinatario: Tal vez había algo sospechoso en tu mensaje, aunque sea sin querer.
- El correo no cumple con los requisitos del remitente: El servidor dijo: “¿Y tú quién eres para escribirme?”.
- El correo no puede ser reenviado entre servidores: Algo falló en la “cadena de entrega” del mensaje.
- El correo no puede ser reenviado por razones desconocidas: Un misterio de la tecnología; nadie sabe qué pasó. 🤷
Por otra parte hay menos casos de Hard Bounces:
- La dirección de correo del destinatario no existe o es incorrecta: Parece que le escribiste a alguien que nunca tuvo ese correo, o lo desactivaron. 📭
- El servidor de correo del destinatario ha bloqueado la entrega por alguna razón desconocida: Tu email fue rechazado por el ESP (por ejemplo, Gmail o Hotmail).
Para solucionar problemas relacionados con los hard bounces, te recomiendo leer cómo solucionar problemas con correos que rebotan o son rechazados por parte de Gmail.